Tras conocerse la reducción de presupuestos y la desaparición completa de ayudas al sector cooperativo, el Consejo Rector de Urcacyl reprocha la actitud de la Junta de Castilla y León, que mantiene un comportamiento de apatía e incomprensión para con las cooperativas, justamente cuando se celebra el Año Internacional de las Cooperativas declarado por Naciones Unidas.

En un artículo que se publicará en el próximo número de mes de julio de la revista de Urcacyl, con una tirada de 40.000 ejemplares, el presidente de la organización, Gabriel Alonso, se dirige firmemente hacia la Junta de Castilla y León, que ha dejado de lado sus responsabilidades y competencias con el mundo cooperativo, el gran vertebrador del medio rural y de la actividad agropecuaria. Este comunicado, respaldado por todo el Consejo Rector de Urcacyl, hace hincapié en numerosas cuestiones, no sólo referidas a la desaparición de ayudas al cooperativismo, sino también protocolarias, tales como la falta de atención del presidente de la Junta y la consejera de Agricultura y Ganadería. “Pero con ser grave la situación presupuestaria, y con independencia del análisis que en su momento habría que realizar sobre los motivos que han conducido a este debacle, lo es más la actitud de nuestros políticos, que definitivamente no se deben al sufrido electorado, que pacientemente les vota legislatura tras legislatura, sino a sus partidos políticos que son los que deciden o no su permanencia en los cargos de responsabilidad”, se cita textualmente

Otro de los aspectos que critica el Consejo Rector de Urcacyl es la incapacidad de comunicación de la Administración. La Mesa del Cooperativismo, convocada durante este año sólo en una ocasión, casi siempre se ha celebrado en ausencia de Silvia Clemente, consejera de Agricultura y Ganadería. Por otro lado, la falta de interés hacia estas entidades asociativas, se demuestra en que el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, no se haya reunido en cinco años con el Consejo Rector de Urcacyl o que no haya visitado cooperativas como Cobadu, Copiso, Agropal o Acor, que son algunas de las empresas más grandes de Castilla y León y auténticos modelos de gestión empresarial.

Desde el escrito se recuerda que Urcacyl y sus cooperativas están formadas por más de 50.000 socios, más de 3.000 trabajadores y facturan más de 1.850 millones de euros.

Como documento adjunto a esta noticia se anexa el artículo íntegro que refleja la crítica situación que ha llevado a que éste sea publicado.